sábado, 7 de octubre de 2017

Hay luna

No entendí ni quise entender
la demencia que obliga a padecer
desaparecer, no ir mas
por los carriles de la normalidad,
mundanalidad vacía.
Pasan los años, envejezco
cada vez es mas grande el agujero
interior, vacío, interior frío
a veces no quiero vivir,
a veces me olvido
nunca anduve con el 38 en el bolsillo
si me sorprendía la angustia,
era remar
naufragar en donde fuera,
salir a correr
desesperar,
desaparecer.
Salgo afuera, hay luna
lejana como nunca, amarilla
sobre el espejo del mar
las nubes, también lejanas
le cortan la cara.
y yo, ya sin remera me dejo abrazar
poseer por el frío de la noche
Ese es mi lugar
nunca estuve mejor, ni lo voy a estar
que protegido en el frio
abrigado del vacío,
envuelto en soledad.

Cansado

 Hoy estoy especialmente triste, desganado, desmotivado y sin ganas de luchar más. Todo parece llevar al mismo lugar de frustración.  Antes ...